Qué ver en 4 días en Estella (España)

Estella, conocida como la "Toledo del Norte", es una joya escondida en la comunidad de Navarra, España. Esta ciudad, con un fuerte legado medieval, cautiva a sus visitantes con su impresionante arquitectura, su rica historia y su magnífica ubicación a orillas del río Ega. Estella es un punto de parada en el Camino de Santiago, lo que le aporta un carácter cosmopolita y espiritual. La belleza de sus calles empedradas y sus monumentos históricos hacen de esta ciudad un destino perfecto para sumergirse durante cuatro días en un viaje por el tiempo.

Día 1: Explorando el corazón medieval de Estella

Plaza de los Fueros

Comienza tu aventura en la Plaza de los Fueros, el centro neurálgico de Estella. Este lugar no solo es un espacio de encuentro para los locales sino también un punto de partida perfecto para apreciar la arquitectura circundante. La plaza, con su vibrante actividad diaria, es un claro testigo de la importancia de Estella en la Edad Media. Aquí, podrás sentir la esencia de la ciudad mientras disfrutas de un café en alguna de sus terrazas y te empapas del ambiente.

Iglesia de San Pedro de la Rúa

Un corto paseo te llevará a la Iglesia de San Pedro de la Rúa, famosa por su impresionante escalinata y su magnífico pórtico. Esta iglesia guarda en su interior tesoros del románico navarro y fue un punto significativo para los peregrinos del Camino de Santiago. El campanario ofrece una vista única de la ciudad, y la belleza de su claustro te transportará a tiempos pasados.

Palacio de los Reyes de Navarra

No puedes dejar Estella sin visitar el Palacio de los Reyes de Navarra, también conocido como Palacio de los Duques de Granada de Ega. Admirarás su fachada gótica y descubrirás por qué es uno de los edificios civiles más importantes de Navarra. Ahora convertido en museo, ofrece un viaje por la historia y el arte de la región, con piezas que datan desde la Prehistoria hasta la actualidad.

Día 2: Ruta de arte y naturaleza

El Puente de la Cárcel

Comienza tu segundo día en Estella con una visita al Puente de la Cárcel, una construcción medieval que une las dos partes de la ciudad separadas por el río Ega. Este puente no solo es un elemento vital en la historia de Estella, sino que también ofrece vistas pintorescas del río y la naturaleza que lo rodea. Es un lugar perfecto para tomar fotos y disfrutar de un momento de tranquilidad.

Bodegas Irache y la Fuente del Vino

Una experiencia única te espera en las Bodegas Irache, donde podrás degustar los famosos vinos navarros. Lo más destacado es la Fuente del Vino, una fuente pública donde mana vino en lugar de agua, pensada para deleitar a los peregrinos y visitantes. Una experiencia vinícola que no podrás encontrar en otro lugar del mundo.

Monasterio de Irache

El Monasterio de Irache, ubicado junto a las bodegas, es una parada esencial en tu ruta. Este antiguo monasterio benedictino cuenta con una historia que se remonta al siglo VIII. Visita su iglesia, el claustro y el museo, donde descubrirás arte sacro y restos arqueológicos que narran la historia del monasterio y su papel en la comunidad.

Día 3: Descubriendo tesoros ocultos

Basílica de Nuestra Señora del Puy

La Basílica de Nuestra Señora del Puy, con su distintiva cúpula verde, es un símbolo de Estella. Esta iglesia, construida en el siglo XX, es un claro ejemplo de la fusión entre tradición y modernidad. Desde su ubicación en lo alto de un cerro, tendrás vistas panorámicas de la ciudad y sus alrededores. Es un lugar de paz y espiritualidad que no te dejará indiferente.

Museo Gustavo de Maeztu

El Museo Gustavo de Maeztu está dedicado a la obra del pintor vasco del mismo nombre. Ubicado en el antiguo palacio de los Reyes de Navarra, este museo te ofrece una colección permanente de las obras de Maeztu y exhibiciones temporales de otros artistas contemporáneos. Es una oportunidad de sumergirse en la escena artística local y nacional.

Paseo por el río Ega

Para terminar el día, disfruta de un relajante paseo por la ribera del río Ega. Este entorno natural es el lugar perfecto para desconectar y contemplar la flora y fauna autóctona. Los senderos te llevarán por paisajes que combinan agua, vegetación y arquitectura, brindándote una experiencia de serenidad en medio de la naturaleza.

Día 4: En contacto con la cultura local

Mercado de Estella

Si tienes la suerte de estar un jueves en Estella, no te pierdas el Mercado de Estella. Este mercado semanal es una tradición que se remonta a la Edad Media y es el corazón de la vida local. Aquí podrás comprar productos frescos y artesanías, además de sumergirte en el ambiente más auténtico de la ciudad.

Convento de Santo Domingo

El Convento de Santo Domingo es un impresionante edificio que atesora arte de gran valor. La iglesia del convento es un magnífico ejemplo de arquitectura gótica, y en su interior encontrarás un retablo renacentista de gran belleza. Es un refugio de historia y arte que te transportará a otros tiempos.

Experiencia gastronómica en Estella

Para culminar tu viaje, disfruta de una experiencia gastronómica en alguno de los restaurantes locales de Estella. La gastronomía navarra es famosa por su calidad y sabor, y en Estella podrás degustar platos tradicionales como la trucha a la navarra, espárragos frescos, y por supuesto, los exquisitos pimientos del piquillo. Un broche de oro para una inmersión completa en la cultura de Estella.

En solo cuatro días, Estella te revelará sus secretos y te hará partícipe de su glorioso pasado, su vibrante presente y su prometedor futuro. Cada rincón de esta ciudad tiene una historia que contar y una experiencia que ofrecer. Con este itinerario, podrás descubrir lo mejor de Estella y llevar contigo recuerdos imborrables de esta encantadora ciudad navarra.